La asertividad es una habilidad esencial para una comunicación efectiva y saludable.
En el ámbito de la psicología, una de las áreas de trabajo comunes a la mayoría de personas son las habilidades sociales, especialmente las habilidades sociales que permiten y favorecen la comunicación. La asertividad además de una competencia, es “una forma de estar en el mundo” que nos permite expresar nuestros pensamientos, emociones y necesidades de manera clara y respetuosa.
En esta reflexión me gustaría contarte de forma resumida cuales son los distintos estilos comunicativos: pasivo, agresivo, asertivo y pasivo-agresivo, describiendo “a grandes rasgos” cómo suelen ser las personas con dichos estilos.
Además, he querido incluir una lista de derechos asertivos, que, si bien para muchos pueden parecer evidentes, no está de más releerlos para analizar si respetamos a los demás y a nosotros mismos.
ESTILO PASIVO
Las personas con un estilo comunicativo pasivo suelen evitar expresar sus opiniones o defender sus derechos. Tienen dificultades para decir «no» y a menudo priorizan las necesidades de los demás sobre las suyas propias. Esto puede llevar a sentimientos de resentimiento, frustración y baja autoestima. Suelen mostrarse sumisas y pueden ser fácilmente influenciables. Suelen ser personas extremadamente complacientes con los demás. En ocasiones, ni siquiera son capaces de contactar con sus propias necesidades o de tener un criterio propio.
ESTILO AGRESIVO
Las personas con un estilo comunicativo agresivo expresan sus pensamientos y emociones de manera dominante y a menudo desconsiderada hacia los demás. Su comunicación puede ser impositiva y ofensiva, lo que genera conflictos y deteriora las relaciones interpersonales. Estos individuos pueden tener un alto sentido de autovaloración, pero a expensas de los demás, provocando miedo o rechazo en su entorno. Son personas que se imponen o “pisan” a los demás, infravaloran a los otros y rechazan a todo aquel que no esté de acuerdo con ellos. En ocasiones, muestran un lenguaje verbal y no verbal agresivo, puede que levanten la voz o que utilicen un lenguaje hostil o inapropiado.
ESTILO PASIVO AGRESIVO
El estilo pasivo-agresivo se caracteriza por una expresión indirecta de la hostilidad. Las personas con este estilo pueden parecer pasivas en la superficie, pero expresan su ira o frustración de manera encubierta, a través de comentarios sarcásticos, comportamientos malintencionados. Este estilo comunicativo crea confusión y desconfianza en las relaciones ya que existe una especie de “doble mensaje”.
ESTILO ASERTIVO
Las personas con un estilo comunicativo asertivo son capaces de expresar sus pensamientos y sentimientos de manera clara, directa y respetuosa. Defienden sus derechos sin violar los derechos de los demás, logrando un equilibrio entre la expresión de sus necesidades y la consideración hacia los demás. Este estilo fomenta relaciones saludables y una autoestima sana. Las personas asertivas son capaces de sostener “un desacuerdo” con el otro, pueden “estar de acuerdo, en estar en desacuerdo” y convivir con que los demás tengan pensamientos y opiniones diferentes, además no invalidan las emociones propias ni ajenas.
LOS DERECHOS ASERTIVOS
Los derechos asertivos son fundamentales y deberían ser respetados en las interacciones entre cualquier grupo de personas.
- Derecho a decir «no» sin sentirse culpable.
- Derecho a expresar con respeto sentimientos y opiniones.
- Derecho a cometer errores y ser responsable de ellos.
- Derecho a pedir lo que se quiere, reconociendo que los demás tienen derecho a decir «no».
- Derecho a cambiar de opinión.
- Derecho a ser tratado con respeto y dignidad.
- Derecho a tener y expresar necesidades propias.
¿CÓMO TRABAJAMOS LA ASERTIVIDAD EN CONSULTA?
En consulta, utilizamos diversas técnicas para ayudar a los pacientes a desarrollar asertividad:
- Entendemos la Asertividad:
Generalmente nos tomamos un tiempo para explicar los estilos de comunicación, quién se nos viene a la mente cuando pensamos en cada uno de ellos. Practicamos las diferentes formas de trasladar un mismo mensaje dependiendo del estilo comunicativo elegido y así nos hacemos cada vez más expertos en detectar el estilo comunicacional de quien nos rodea y mejorar el propio.
- Entrenamiento en habilidades sociales:
A veces pasar de la teoría a la práctica no es tan fácil, por lo que si fuera necesario se aprenden y practican habilidades específicas, como el contacto visual, el tono de voz y el lenguaje corporal adecuado.
- Role-playing:
A través de simulaciones, los pacientes practican situaciones cotidianas donde necesitan ser asertivos, generalmente cuando lo proponemos en terapia aparece un poco de vergüenza y a veces con ella otras emociones como el miedo o la culpa. La terapia nos proporciona un refugio seguro donde practicar estas “conversaciones difíciles” para enfrentarlas con menos sufrimiento en la vida real.
- Técnicas Cognitivas
En ocasiones existen “frenos” que no me permiten ser asertivo o que hacen que siempre tenga que mostrarme en uno de los polos. Es lo que sucede en ocasiones con las personas que se comunican de forma “pasivo-agresiva”, no se ven capaces de ser directos, pero no quieren ser sumisos y tampoco abusones por lo que se quedan en ese terreno confuso del mensaje encubierto.
Uno de los frenos más comunes con los que nos encontramos en terapia son las creencias irracionales. Si creo que “A la familia no se le niega nunca un favor” o “Un buen empleado se queda las horas que hagan falta hasta terminar todo el trabajo”, me costará mucho poner límites sanos.
- Técnicas de relajación.
Para reducir la ansiedad que puede acompañar a la expresión asertiva, se enseñan técnicas de relajación y manejo del estrés para podernos enfrentar de una forma “mas segura” a las situaciones temidas.
Desarrollar la asertividad es crucial para una comunicación saludable y relaciones interpersonales satisfactorias. Este proceso no solo mejora la capacidad de comunicación, sino que también fortalece la autoestima y el bienestar emocional de los pacientes. Además, si te paras a pensar, probablemente la mayoría de personas que tienen una autoestima sana y son seguras de sí mismas y que además te hacen sentir bien cuando están con ellas suelen ser asertivas en su comunicación contigo.
Gracias por leerme. ¡Nos vemos en consulta!